20.2.04

Es un buen día. Llego al banco y no hay gente, tampoco había pluma, pido una, tenía tapa roja y cuando empecé a escribir era azul. Hice lentamente la ficha, todavía siento que le falta el azul a toda la papelería de Bital, ahora HSBC, no se cuando me acostumbraré. 23 grados para las 8:30 am, es mucho, pero se siente bien, después del fri-íto de los días pasados.

Estoy tratando de arreglar mi situación acádemica, y odio hablar con tanta gente de trámites que ni siquiera conoces y a quienes les vale gorro si tengo problemas y si ya hablé con 18 personas antes que con ellos. Al final, todo es mi culpa, de nadie más, pero a mí me encanta quejarme.

Ayer me paró un tránsito por darme vuelta en un segundo carril. Siempre lo hago, pero esta vez no tenía ganas de rogarle que no me infraccionara, así que dejé que las cosas fluyeran y que pasó? le dí mis documentos, me dijo que me iba a recoger uno de ellos en garantía y blabla, me preguntó si estaba de acuerdo que me infraccionara, yo solo le dije que no, él daba vueltas y más vueltas, veía las placas, la serie del carro, iba, regresaba, hasta que me dijo que no me iba a levantar la infracción, que nada más firmara en el aire porque lo estaban grabando (eso dijo), y que porque tenía muy bonita sonrisa....jejeje. Mmmmm ahora que yo ya estaba bien instalada en infraccionada, pos bueeeno.

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